1.8.10



Resulta que no puedo dirigir y mantener mi atención a una cosa a la vez, gran problema de toda una generación que creció con google y las adictivas pestañas de firefox.

Hay tardes como estas que en las que me siento a escribir para tratar de comprender. Comprenderme. Entre Marx y el Liberalismo se cuelan ideas y sensaciones impropias para este momento. Me detengo para escribir. Escribirme.

A diferencia de lo que pensaba y de experiencias anteriores, no estoy sufriendo de la nostalgia y de extrañitis aguda, parece que entre tumbos y tortazos aprendí a querer sin poseer, lo cual me enorgullece desmedidamente. Querer y amar requieren de ejercicios cotidianos de desaprender la forma capitalista de relacionarnos que tenemos. En muchas formas de relaciones experimente sentimientos de posesión hacia otr*s y de otr*s hacia mi. El ser libre puede verse condicionado en el momento que posamos nuestras miradas en un alguien poseedor o en un alguien que pide ser poseid*. La competencia es otra de las cualidades que logro reconocer como un valor o acción sumamente negativo de experimentar. Diferentes personas produjeron en mí esa sensación de tener que competir, es realmente desgastante. Creo que eso es algo que también aprendí, y voy arando mi propio camino y sembrando mis propias semillas, mirando al lado pero viendo a un* compañer*. Generar lazos solidarias, es hermoso estar pasando por un momento de tristeza inexplicable y tener las voces solidarias que no buscan solucionar los problemas, sino regalar palabras de comprensión y un abrazo mucho más sanador que cualquier solución. Porque no todo tiene sanación.

Entre tanta militancia empiezo a darme cuenta que también estoy yo, como sujeta activa que a veces necesita estar pasiva. Entre la gente de la marcha me visualizo, y llego a conclusiones de reflexionar. Desde este lugar de tristeza de esta última tarde de julio, me apodero de ese sentimiento, que en definitiva es lo único que es mío, y lo vivo, como se deben vivir las cosas. Y dejan de importar tantas cosas.

7 comentarios:

  1. Guau, ese texto dice mucho...

    =)


    Te dejo un abrazo inmenso, de esos cruza distancias, que nos acercan y nos descongelan las sonrisas.

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  2. empieza a molestarme que cada vez que termino de leer varios de tus textos solamente puedo comentar lo mucho que te quiero y lo orgullosa que estoy de que seamos amigas, de tenerte cerca y acompañarte en esta etapa de tu vida.

    te regalo, hoy y siempre, mi abrazo.

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  3. Uff Mucho tiempo sin pasar por aca...
    Muy lindo lo escrito :)

    Un beso!

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  4. mE GUSTa , sabes expresarte , no todos poseeemos ese don..

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  5. ey
    que lindor.
    no lo de la tristeza, la melancolía, lo que fuera que trae el aire de invierno, sino lo de la reflexión. El activo saber que estamos, vivxs. Que somos (Che creo q lo dijeron hace mucho a esto).. lo que yo digo ahora es: que lindo encontrarte en un lugar cómodo en el mundo, donde estés feliz o triste, podés estar bien.

    espero que se entienda esto
    me puse a releer rayuela y mi mente esta toda asi ahora.

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  6. 1. El amor es libre: soy tuyo no porque me poseas, soy tuyo porque yo quiero serlo. Lo que implica que cuando quiera dejar de serlo, ya no lo seré. (El ser humano es lo que decide ser)

    2. El amor es verdadero: te amo porque te amo, no porque me ames tú.
    Es más importante querer que ser querido, porque al final, es lo único que está en nuestras manos.

    3. La tristeza no implica infelicidad, muchas veces se es feliz estando triste, ya que denota un querer profundo y verdadero, y todos, a pesar que duela, tendríamos que estar orgullosos de querer y de aquell@s a quienes queremos

    Está genial lo que escribiste...realmente genial.

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