22.9.09

Hoy trate de extrañarte, y no me salió. La melancolia que sentía en las tardes angostas desapareció.
"En hora buena", pensé yo. Eso me llevó a pensar ¿cuan real era la verdad de las palabras que te dije y cuan verdad eran las palabras que vos dijiste?
No me importa que esa pregunta se conteste, solo quiero tener en cuenta que la idealización de las personas corresponde a un estadio inmaduro del alma humana, considerome lo suficientemente madura para desaserme de esa mala costumbre de idealizar a personajes fantásticos para evitar la ruptura con la realidad. (aunque ultimamente demasiado lejos de ella me encuentro. )
Por lo tanto debo ser cauteloza al mirar, por que en este universo donde no existen los hechos solo las interpretaciones como alguna vez dijo mi querido amigo Federico Nievas, todo es relativo, hasta mi propia verdad. La analítica existencial nos hace concientes de que el conocimiento es siempre una interpretación y nada más.
Entonces ¿cómo sabré cuando idealizo?
A veces mis ansias de racionalidad me llevan a querer entender a Gödel, tal vez todo sería más sencillo.
Entonces reformulo mi pregunta "¿Siguen las palabras y las ideas reglas formales, o no?"

Entonces, y no se como llegue hasta aca, yo soy una oración verdadera, y lo que declaro es que no puedo ser comprobada dentro de este sistema al que pertenezco.

A través de Khalil Gibrán:
"Y en mi locura he hallado la libertad y seguridad; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser."

1 comentario:

  1. son cosas q pasan y hasta en las mejores familias(?) aunque hasta eso es tan relativo...


    ¿Cómo saber si se idealiza? El tiempo da la pauta...

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